
Sonetos para un adiós.
Aún no te conocía cuando me dijiste adiós.
Soneto
libre XXXVII
11
– 07 - 2019
Desde el principio supe que no te conocería.
Que te amaría, lo supe desde el principio
aunque no te conociera.
Y lo acepté como se acepta lo inevitable,
la furia de los vientos o el fragor de la tormenta.
Fuiste para mí una nube con la forma de arco iris,
y como el arco del cielo, contenías
los colores con que te pinté en mis sueños.
El viento jugaba con tus cabellos y tu larga falda
tremolaba a cada paso como bandera de paraísos
ocultos
escondidos entre blondas juguetonas
que insinuaban paisajes de deseadas delicias.
Eso fue hace mucho tiempo, tanto que cuando dijiste
adiós,
supe que te marchabas sin haberte conocido.
Francisco
Murcia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario